Manías lectoras

¡Hola, Choco-lectores! Hoy os vengo a compartir mis manías lectoras. Las no lectoras las dejo aparte.
Soy una persona muy maniática y mis libros no quedan impunes de ellas así que allá van:

1. Pausa de lectura: siempre intento dejar de leer al acabar un capítulo, pero que ese capítulo termine en la hoja derecha para que el siguiente comience al pasar la página. Y así me pasa, que hay libros que tienen muy pocos capítulos que empiecen en la hoja izquierda y dejo de lado todo lo que tengo que hacer hasta que llego a ese capítulo o lo paro donde sea y no me quedo a gusto hasta que lo retomo.

2. Controlando las páginas: Suelo ir mirando las páginas que me quedan para llegar a un capítulo que empiece en la izquierda, marcándolas con los dedos. Pongo un dedo entre cada capítulo y muchas veces tengo casi una mano entera en el libro.

3. Marcar citas favoritas: no marco citas de ninguna forma, las suelo escribir en cualquier sitio y luego siempre se me olvida dónde las escribí, o sacar una foto a esa parte y enseñársela a algún amigo. Últimamente mientras estoy leyendo escribo un comentario en Goodreads dejando la página en la que está y que es por la que voy leyendo, ¡Gracias, Currently reading!
Solo he marcado partes que me gustaban en un libro y es el libro que tengo en peor estado. Solía doblar las esquinas de esas páginas e insertaba trocitos de folio entre las que más me gustaban. Ahora guardo dentro de él casi todos mis marcapáginas y curiosamente es el libro al que más cariño guardo Sí, más que al principito a pesar de que su historia hace mucho que dejó de interesarme. En realidad, solo marcaba las citas de famosos y letras de canciones que aparecían al principio de cada capítulo, pero no sé, lo he toqueteado mucho y es el que siento más mio.

4. Cambio de marcapáginas: si el libro que estoy leyendo no me está gustando y tiene un marcapáginas bonito lo cambio por uno de los más feos que tenga. Sé que es muy raro, pero no sé por qué mi mente ha decidido que si el libro no me gusta no se merece un buen marcapáginas. Además no me gusta que el marcapáginas sea más grande que el libro y se sobresalga por si se dobla.

5. Mensajes durante la lectura: me sabe muy mal ignorar mensajes si he visto que me han llegado, incluso si estoy ocupada paro y contesto. Pero al leer me descoloca ver la luz de notificación en el móvil, no me llega sonido porque lo tengo siempre en silencio, de todas formas no contesto hasta que no he terminado la página pero pierdo la concentración unos segundos y eso me fastidia bastante.

6. Superficial con las portadas: si un libro tiene a alguien semidesnudo o una pareja besándose en la portada no lo compro. Todos los libros de mi madre tienen ese tipo de portadas y una parte de mi no quiere enterarse de lo que lee. Una vez leí un libro de los suyos y no me gustó para nada, así que no quiero repetir la experiencia.

7. Libros de viaje: soy bastante asocial, hasta el punto de que me llevo un libro a cualquier parte, si salgo a algún lugar con mis padres me llevo un libro, si voy a visitar familiares igual. Es incluso raro verme por la calle sin tener un libro en la mano. (No llevo bolso casi nunca). He de decir que muchas de esas veces ni siquiera lo abro, pero está conmigo. Cuando voy a la piscina o la playa cojo alguno pequeño o normalmente de bolsillo. Aunque esos siempre acaban mal, por mucho cuidado que tengas y muy lejos del agua que estés, vendrá alguien con el pelo aún mojado a preguntarte qué lees y varias hojas quedarán arrugadas de por vida.

8. Ruidos al leer: no me suele molestar ningún ruido mientras leo. Muchas veces me pongo música o veo la tele a la vez, y, estoy acostumbrada a leer rodeada de gente. Eso sí, agradezco que me interrumpan lo mínimo posible.

9. Lugar y horario idóneo: como ya he dicho antes, donde sea que esté, llevo un libro conmigo. No tengo problemas de concentración si la historia me engancha. Si algún día veis a una chica en un bar de madrugada ya sea dentro o fuera leyendo alumbrándose con la poca luz de las lámparas o farolas, soy yo. Aunque mi lugar preferido para leer siempre será en mi cama por la noche.

10. Malos hábitos: un libro es mi fiel compañero allá donde vaya, y eso a veces me causa estragos. He llegado a leer solamente con la luz de mi móvil como linterna, ¡E incluso caminando por la calle! Y esto de leer con una mala iluminación y donde no se debe me ha ocasionado varios accidentes y que mi vista empeore bastante en muy poco tiempo. Estoy tratando de eliminar o al menos reducir estos malos hábitos por mi bien y el de los inocentes transeúntes.

11. Entre varias historias: Es muy raro que no tenga más de dos libros empezados. Eso sí, el que más me engancha es el que continúo y el o los otros los dejo apartados hasta que lo acabo.

¿Y vosotros, Choco-lectores? ¿Cuáles son vuestras manías lectoras, coincidimos en alguna?